Me bajé del taxi y allí estaba el gran Juanito de Triana esperándome para aprovechar ese mediodía en ver el Strip de Las Vegas antes de empezar a machacar el cerebro (el corazón de las Vegas donde se encuentran todos los hoteles y cosas que debes ver dentro de la ciudad si la visitas).
Partimos desde Luxor y pasamos por Excalibur, MGM, Bellagio, Monte Carlo, Paris, Caesar Palace… y no sabría describir que me asombraba más. Las imitaciones a las esculturas romanas de Caesar Palace, las góndolas reales que viajaban sobre el agua del segundo piso interior del Venetian, El gran Leon del MGM, la torre Eiffel del Paris, la réplica de la estatua de la libertad, el atractivo diseño de Excalibur… además en el transcurso vimos detalles importantes como el store de CocaCola, el HardRock las Vegas, Planet Hollywood, y mil detalles que conquistaron mi lado artístico.
Después de andar más de 10 Km por las Vegas nos dimos una ducha, cada cual en su hotel y nos preparamos para el próximo día.
El siguiente día empezó la caña, hubo preparativos de la conferencia de DUST y la FOCA, hubo piscina, y para relajar la mente recibimos una invitación para la fiesta de que organizaba RAPID7 en el PALMS, de la mano de Chema.
Esa noche, Silverhack y yo fuimos a aquel edificio, que según me pareció era el más alto de las Vegas, y en el piso 52 se encontraba el lugar donde nos esperaban. El piso 52 y 53 era una sala/disco que había contratado RAPID7 (los actuales dueños de la suite para PENTESTING Metaexploit) y que sólo por 200.000 pavos, podría permitirse ese lujazo!
Subimos las 52 plantas en ascensor; todo brillaba por si grandeza, por las geniales formas en las que nos atendían, por el decorado y por «los hackers», ya que la mayoría de las personas presentes eran gente relacionada con el sector.
Cuando salimos a la terraza que tenía la disco pudimos observar la grandeza de las Vegas desde lo más alto mientras oíamos una música increíble que nos ponía los vellos de punta, tal y como un chico cuando abre sus regalos de reyes. Era increíble la idea de pensar que estábamos en las Vegas, en el piso más alto, escuchando la mejor música con los mejores expertos del sector, para compartir conocimiento, compartir una risas y crecer como personas; me lleno sobremanera.
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